Fuente: Experiencias marineras – Turismo Marinero
Por Leonor Cabrera ( @leonor_cabrera ) – Viventi Desarrollo Personal y Profesional
El turismo está cambiando de forma vertiginosa. Sólo tienes que echar una mirada hacia ti y preguntarte qué buscas cuando vas a algún lugar de viaje. Si los viajeros de generaciones anteriores se contentaban con ir a un lugar, conocerlo, visitarlo y observarlo, los viajeros de ahora lo que queremos son experiencias que nos hagan vibrar, sentirnos únicos y que estamos exprimiendo 100% la visita a ese destino.
De un turista que, podríamos llamar, pasivo se está pasando a un viajero activo que lo que desea es exprimir su estancia en tal o cual o destino.
A la hora de emprender en el sector turístico, es algo que debemos tener en cuenta y que abre unas oportunidades de negocio más que interesantes.
Así lo han pensado por ejemplo los creadores de Zozi, una web que ofrece escapadas turísticas con medallistas olímpicos, además de experiencias tan variopintas como recorrer el Gran Cañón del Colorado en mountain bike, clases de cerámica en San Francisco, clases de boxeo en Boston o un tour paranormal en Mystic River.
Otro ejemplo de esta vena de experiencias es la que realiza Ocean Gate, que ofrece turismo científico por las playas de medio mundo, mientras que Whole Foods, una cadena de supermercados estadounidenses, ha abierto Whole Journeys, una agencia de viajes a través de la que ofrece visitar los países de los que provienen las materias primas que vende.
Sin ir tan lejos, en Andalucía también hay empresas que venden experiencias y que lo hacen muy bien. Una de ellas es Turismo Marinero, con sede en Estepona (Málaga) que, por ejemplo, permite vivir la experiencia de realizar la misma ruta que realizan los pescadores y vivir lo que es dedicarse a este duro oficio. Lo que ofrece Turismo Marinero es vivir la experiencia que cada día viven esos pescadores, quienes tienen que salir a faenar haga sol o haga lluvia y que tienen en el mar su segunda casa.
La oleícola San Francisco de Jaén de Begíjar (Jaén) hace algo parecido pero en el campo. Ofrece ser aceitunero por un día a cambio de 30 euros. Esa experiencia, tan sólo disponible los meses de recogida de aceitunas, incluye varear los olivos y después ir a la almazara para que los viajeros puedan hacer su propio aceite. Incluso de Alaska han tenido cliente este año, lo que demuestra que los viajeros están interesados por este tipo de experiencia en la viven cómo es un trabajo duro y característico de las zonas en las que hay olivo.
Como puedes ver, hay mucho recorrido en el sector turístico en este momento. Abrir una agencia de viajes, un hotel o un restaurante no son ni mucho menos las opciones existentes para emprender en este sector. Con un poco de imaginación y usando recursos que ya están ahí, como es el caso del mar o de un olivar, han surgido dos productos turísticos diferentes, novedosos y que se basan en hacer vivir al turista una experiencia propia y única, que tan sólo se puede vivir aquí, en estos lugares de Andalucía.