Por Beatriz Perea Medina ( @REDPLAN_ ) – Red Plan Consultores
Si entendemos lugar como escenario capaz de albergar diferentes espacios y lo trasladamos a la empresa, encontramos un interesante modelo de negocio en el que la incorporación de un espacio adicional genera un valor añadido al cliente. Lo mejor de esta propuesta es que presenta la posibilidad de implementarla en cualquier establecimiento, sin necesidad de grandes cambios y manteniendo la esencia original. ¿Cómo? Con IMAGINACIÓN.
Cada vez más, el hecho de comprar ya no es sólo adquirir un producto o servicio, sino experimentarlo; leer un libro mientras tomamos un café, coser con el aroma de un pastel o tener la posibilidad de degustar el aceite antes de comprarlo… Esto es una realidad, existen numerosos establecimientos que ya aplican la fusión de espacios así que, ¿por qué no? Quizás es hora de dar una vuelta a nuestro negocio.
De esta forma, revoluciona el concepto típico de tu negocio, propón nuevos servicios y causa impacto en el cliente. Un impacto de sorpresa, satisfacción y recuerdo, motivado principalmente por ese espacio adicional, por la facilidad de realizar varias actividades al realizar la compra o degustando un buen té.
Así, se proponen conceptos ligados a la actividad principal pero ligeramente aislados, trasladando al cliente a momentos de tranquilidad y armonía.
Es lo que se pretende conseguir, ofrecer un momento de descanso en la sociedad estresante en la que vivimos.
Las alternativas en los establecimientos, pueden ser, o no, actividades materiales. Algunos ejemplos que proponemos son:
En una frutería, plantear un espacio de degustación con una fuente de chocolate y brochetas de frutas. Dejarás a tus clientes hipnotizados.
En una cafetería: Crear un club de idiomas. Invita a tus clientes de diferentes nacionalidades a compartir mesa y experiencias que les permitan conocer nuevos idiomas a través de conversaciones habituales.
En una bodega; incluye una terraza abierta al público donde ofrecer vinos con diferentes sugerencias de maridaje y envuelve a tus clientes en el mundo del vino en un entorno “no habitual”.
Existe una gran cantidad de iniciativas que tanto grandes como pequeños establecimientos pueden llevar a cabo. Miremos hacia el futuro y a nuestro alrededor, aprendamos de aquellos que comenzaron antes que nosotros, como las grandes superficies comerciales, que permitían escuchar discos musicales o jugar al videojuego que queríamos comprar antes de adquirirlo.
Pero siempre dándole carácter al espacio, mostrando personalidad y sin olvidar que toda iniciativa que se desarrolle será un plus para el cliente y que repercutirá directamente en el negocio.
Innovación en turismo significa sumar y diferenciarse. ¿Te unes?