Por Juan Manuel Medina Guzmán – Oportunidad Accesible
Consultor en servicios de accesibilidad y discapacitado visual.
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Foto: Juan Manuel Medina Guzmán
Debido a la existencia de barreras -no sólo arquitectónicas sino también sociales, gastronómicas y de acceso a la comunicación-, las personas con alguna discapacidad en muchas ocasiones no podemos realizar determinadas actividades de la vida diaria en diferentes ámbitos de la sociedad, al igual que cualquier otra persona.
Mi objetivo es que personas con cualquier tipo de discapacidad puedan ser lo más autónomas posibles.
Esto se consigue mediante la eliminación de las barreras en los lugares turísticos, museísticos, instalaciones municipales, facilitando la realización de actividades y el acceso a las nuevas tecnologías y disponiendo de aplicaciones y soportes adecuados para ello.
Para ello, comencé a realizar trabajos destinados a la eliminación de esas barreras: dípticos, placas de metacrilato y etiquetas para los hoteles y restaurantes, etiquetas para las botellas, cartas de menú y el asesoramiento a las administraciones públicas, como la Diputación de Málaga y el Ayuntamiento de Ronda, para hacer de éstas ciudades accesibles. Por estos trabajos me concedieron los premios Puente del Turismo 2009 y Málaga Rural 2010, catalogando la consultoría del proyecto de la Diputación como mejor proyecto turístico de la provincia.
Lo que me pasaba hasta este momento es que, hasta recibir la colaboración del Centro de Innovación Turística Andalucía Lab, no disponía del respaldo de una institución u organización que me ayudara a darle el impulso y la promoción necesaria a esta labor entre empresas, particulares y administraciones, especialmente en la industria turística.
Y es que ésta ha de ser consciente de que los discapacitados forman un colectivo que también desea y quiere disfrutar de estos servicios. A ellos también hay que tenerlos/as en cuenta y concienciarnos de sus limitaciones, mediante la adaptación y adecuación de las instalaciones y servicios. Esto, además, no tiene un coste tan elevado si lo comparamos con la rentabilidad que podemos obtener.
Por eso las razones para apostar por la accesibilidad se pueden resumir en cinco:
- Facilitar el acceso a todo tipo de personas y en particular a discapacitados/as hace que estos lugares puedan ofertar un “Turismo para todos”; un turismo sin barreras.
- Demandar unos espacios habitables y accesibles es un requisito que vincula por igual a todas las clases sociales. Esta exigencia precisa la combinación de unos planteamientos constructivos de accesibilidad y las posibilidades de las nuevas tecnologías.
- Los turistas con movilidad reducida y/o con discapacidad son altamente rentables porque generalmente realizan un mayor gasto, al contratar paquetes turísticos en lugar de organizar los viajes de forma independiente.
- Son generadores de empleo, al diversificar la oferta turística.
- La elección del alojamiento por parte de este colectivo no responde a la categoría del mismo ni al nivel adquisitivo del cliente, sino a la accesibilidad ofrecida.
En definitiva, hay que seguir concienciando a la sociedad de la necesidad de eliminar las barreras, no crear nuevas y respetar las ya eliminadas como pilares fundamentales para facilitar la vida diaria y el disfrute de los servicios de las personas con discapacidad.
Innovación en turismo significa sumar y diferenciarse. ¿Te unes?