Foto: Favio Gutiérrez
Por Zoraida Lemos – Reanimarketing.com
Lo primero que recorta una empresa en crisis son los empleados y el departamento de marketing y publicidad. Pero el marketing bien realizado está para generar negocio, por lo que hay que contar con la ayuda de un profesional o empresa para:
– Ayudar a adaptar el sistema productivo del negocio a la nueva situación del mercado.
– Trabajar en el análisis y rediseño de los productos ante el cambio de necesidades del mercado.
– Diseñar estrategias eficaces de fidelización de clientes y captación de nuevos potenciales.
– Búsqueda de nuevos canales de comunicación con una alta rentabilidad y un coste más reducido, propicios para los productos de la empresa.
– Análisis del mercado que permita obtener información que ayude al reposicionamiento de la empresa en el nuevo mercado.
Aplicar el DAFO en nuestra empresa
Se trata de conocer a tu empresa en lo bueno y en lo malo para mejorar o para ver tu realidad, dicho en sencillas palabras.
Las siglas DAFO significan:
D debilidades (nuestras)
A amenazas (entorno)
F fortalezas (nuestras)
O oportunidades (entorno)
El análisis DAFO nos ayudará a conocer la situación actual en que está nuestra empresa, tanto interna como externamente.
Haz un ejercicio: Se trata de que vayas escribiendo las debilidades y fortalezas de la empresa (ambas son internas). Por ejemplo, una debilidad sería «la empresa es nueva y no la conoce nadie». Mientras que una fortaleza sería «tengo contactos en el extranjero y puedo aprovechar para hacer negocios fuera de España». Acto seguido, escribe las oportunidades y amenazas. Éstas son generales, ya que afectan a todo los españoles sea por la ley o por cambios climáticos, etc. Con este ejercicio te harás una idea de qué puedes mejorar y qué oportunidades podrías aprovechar para sacar adelante tu empresa.
Conocer la competencia, el mercado, y los posibles clientes
Es importante que conozcas tu competencia directa e indirecta para conocer su marketing, sus clientes, en qué tú eres mejor que tu competencia y en qué te diferencias de ellos. Esto último se conoce como tu «valor diferencial único» que lo explicaremos más adelante.
Para conocer el mercado hay que investigar sobre estadísticas de consumo, compra, comportamiento y qué cuota de ese mercado podría ser mía, según mis expectativas y los datos obtenidos. Así como estudiar estas variables a fondo ayuda a fijar unas previsiones de ingresos más realistas.
Si tienes un hotel, restaurante o un local investiga el tipo de personas residentes en la zona donde se encuentra tu local para poder ejecutar una estrategia de ventas ajustada según las necesidades de la gente que vive o trabaja a tu alrededor. Averigüemos cómo y quiénes son tus posibles clientes…
¡PREGUNTÉMOS!
Nuestros colaboradores, empleados y los clientes actuales nos darán una información valiosísima. ¿Quién mejor que nuestro propio cliente para decirnos qué es lo que más le gusta, lo que menos le gusta y propuestas para mejorar?
Esta investigación nos puede ahorrar tiempo y dinero. Veamos un ejemplo: En una cafetería donde sus clientes en su mayoría son jóvenes, el dueño se empeñó en dar unas pastas caseras junto al café.
Se le preguntó: ¿y qué les ha parecido a los clientes?
A lo que el dueño dijo: la verdad es que no han dicho nada.
Seguramente a los jóvenes no les importa las pastas, pero seguramente sí le darían más valor a que la cafetería tuviese wifi.
Encuentra y explota tu valor diferencial único
El valor diferencial y único de nuestra empresa es algo que nosotros tenemos y los demás no. Este valor puede ser un producto único, unos empleados que son especialistas en X, siempre hay “algo” en que somos mejores y únicos.
¿Tienes algún servicio que vendes más o te gusta más ofrecerlo porque estás a gusto y los clientes también? Piensa si ése podría ser tu valor único que te diferencia de los demás y explótalo.
Innovación en turismo significa sumar y diferenciarse. ¿Te unes?
