Por Rafael Benítez Moreno – Socio de Walnuters encargado del área de conversión
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Antes de cualquier acto de compra hay un proceso de decisión de compra y una estrategia previa de un consumidor o grupo de consumidores. Me da igual que sean personas o empresas, lo que me importa es que sea yo el resultado de la ecuación que os propongo.
Podemos entender que la Marca Personal es la capacidad que tenemos de intercambiar procesos de valor por bienes o servicios, que están sustentados en una elección de un YO (marca) y son declarados como eficaces y eficientes en la mente del consumidor.
¿Estamos ahora en la mente del mercado?
Esa es la primera pregunta que deberíamos hacernos todos. Si hablamos del proceso de decisión de compra la primera variable que debemos tener en cuenta para nuestra marca personal es el Reconocimiento del problema o percepción de una necesidad. ¿Sabemos que necesita la gente? ¿lo hemos preguntado alguna vez?
¿Qué puede necesitar el mercado de mí?
La siguiente variable a tener en cuenta si queremos una marca personal fuerte es que el mercado tiende a buscar una solución de valor e informarse. Aquí cada uno de nosotros pude empezar a poner en marcha un proceso que se lleva realizando desde que el hombre tiene conciencia: preguntarse a sí mismo. ¿Para qué valgo yo realmente? ¿Nos lo hemos preguntado alguna vez? No es una cuestión negativa, pero sí introspectiva, realista y que puede marcar el resto de nuestra vida.
Ser bueno en algo no es la variable de compra que buscamos. ¿Cómo me ve mi cliente?
Hay que tener en cuenta que el mercado (tercera variable del proceso de decisión de compra) busca alternativas a su ecuación de necesidad. El mercado es justo, equilibrado y busca siempre la mejor opción de entre todas las alternativas a su disposición.
¿Has pensado cuál es el canal de distribución de tu marca personal?
¿Eres la alternativa a un gigante?
Seguro que la respuesta es afirmativa, pero no está mal plantearse una estrategia en este proceso. Lo vimos en el Miércoles Lab que se diseño para ello.
De los IM-Personales a comprar a “TÚ”
¿Qué pasa cuando hemos evaluado todas las alternativas? Decido comprarte (Cuarta variable) . Así de sencillo. ¿No eras la apuesta con más valor entre todas mis alternativas? No puedes pedir más ¿no?. Pues no podemos aplaudir todavía ni saltar de emoción. Ahora es cuando viene el trabajo duro y será el que marque el cimiento de nuestra MARCA PERSONAL consolidada.
Ya te he comprado pero, ¿he quedado satisfecho?
Recuerda que el comportamiento postcompra (última variable del proceso de decisión de compra) es una de las variables más importantes para tener una marca personal solida. ¿Qué dicen de nosotros y cómo lo canalizamos? ¿Alguien se ha sentado con lápiz y papel a elaborar un mapa de empatía personal? ¿Cómo me ven mis clientes? Un trabajo perfecto no es el último paso, puede que todo nuestro esfuerzo caiga en un pozo sin fondo si no sabemos canalizar el servicio post venta realizado: TU CLIENTE, el que te convertirá en grande con el tiempo o un ente IM-PERSONAL.
¿Tu marca personal tiene alguna estrategia?
¿Sabemos vender aquello en lo que somos realmente buenos?