Miriam Cámara Sales Channel Manager Wolters Kluwer Tax & Accounting España
Tras el anuncio de la apertura de la segunda convocatoria del programa Kit Digital, se abre una nueva oportunidad para la transformación digital de las empresas y autónomos, en este caso de entre 3 y 9 empleados. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de organizaciones cuya plantilla está en esta horquilla asciende a más de 430.000, que son las que podrán optar a partir del 2 de septiembre a un bono digital de 6.000 euros que les permita subir al tren de la digitalización, lo que contribuirá ya no solo a su propio crecimiento sino a la mejora del sistema económico global.
Hace varios meses, y gracias a los Fondos Europeos Next Generation, el Gobierno español puso en marcha el programa Kit Digital con el objetivo de financiar la inversión en digitalización de las pymes españolas. Este programa constaba de tres convocatorias: en la primera, abierta el pasado 15 de marzo, las empresas entre 10 y 49 empleados pudieron optar a ayudas de hasta 12.000 euros; la segunda etapa que se abre ahora está destinada a pymes entre 3 y 9 empleados, con ayudas de hasta 6.000 euros; y, por último, previsiblemente durante el último trimestre del año, está prevista una tercera convocatoria con ayudas de 2.000 euros para empresas de menos de 3 empleados.
El tejido empresarial español está formado, en su gran mayoría, por microempresas: según datos del INE, la mayor parte de las compañías españolas tienen entre 1 y 9 empleados y el 82,81% de las compañías cuentan con menos de 3 trabajadores.
¿Qué tienen en común las pymes españolas? El reto de la digitalización. Las pequeñas y medianas empresas de este país cuentan con una desventaja estructural respecto a las grandes compañías en temas de transformación digital, una brecha digital histórica que se hizo más relevante tras la crisis económica y social derivada de la pandemia. Hoy en día, la innovación y la transformación digital se han convertido en elementos clave ya no solo para crecer y ganar en competitividad, sino para sobrevivir. Así pues, el reto de las pymes pasa por afrontar este desafío y deben hacerlo a través de una estrategia bien definida y transversal, lejos de la improvisación con la que se solían tratar estos temas hace unos años.
Esta composición del mercado empresarial, formado por una aplastante mayoría de pequeñas empresas sin capacidad tecnológica, ha provocado que el modelo económico español haya sido más vulnerable ante la crisis del Covid-19. Sin embargo, la pandemia ha acelerado los cambios y ha supuesto el inicio de un cambio de mentalidad empresarial: ya es un hecho que la digitalización es una necesidad y que su déficit provoca una pérdida de competitividad o incluso el cierre.
En este contexto, las ayudas de los Fondos Europeos constituyen una oportunidad y garantía para llevar a cabo la transformación digital. Ahora es el turno de las empresas de 3 a 9 empleados, que pueden obtener una inversión sin precedentes para adquirir herramientas tecnológicas con las que no contaban.
Las pequeñas empresas deben participar de forma activa en esta segunda convocatoria del bono digital; es importante seguir concienciando sobre la importancia de la digitalización e incentivar en la solicitud de las ayudas europeas. Solo así haremos frente a esta necesidad de las pymes y abriremos el camino hacia la recuperación, contribuyendo a crear un nuevo modelo económico y social para dibujar el tejido empresarial del futuro.
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