Por Eva Mª Caravaca – FeelQuality
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Se habla mucho de la gestión del talento en la empresa, sobre todo desde la perspectiva de grupo o de equipo de trabajo. En este post, sin embargo, vamos a proporcionaros unas prácticas nociones para gestionar nuestro propio talento. Es importante saber gestionar nuestro propio talento para poder potenciar el de los demás. Tanto si somos emprendedores, como directivos, intraemprendedores, líderes de un equipo o formamos parte de él; el talento es beneficioso dentro de la empresa.
En primer lugar, nos podemos preguntar en qué consiste el talento. La definición más sencilla que existe es el conjunto de capacidades que una persona posee.
El talento existe, pero lo importante es poder desarrollarlo, para ello necesitamos tener en cuenta los conocimientos, las capacidades, nuestra motivación, intereses, conocer las fortalezas y debilidades, nuestras y de nuestro entorno; en resumen, es fundamental conocernos como individuos. Pero no como un individuo aislado y único; como un individuo social.
En este autoconocimiento de nuestra persona tenemos que parar un momento y reflexionar y observar aquello que tenemos y que no nos hemos dado cuenta de que está en nosotros. Muchas veces pasamos por alto capacidades que poseemos y que no nos hemos percatado de que existen.
Otro aspecto a tener en cuenta para gestionar nuestro talento es conocer y reconocer que el talento puede estar ahí, pero tenemos que practicar y perfeccionar nuestras capacidades. Depende de nosotros potenciar nuestro talento. Es necesario, entonces, trabajar nuestras capacidades para potenciarlas.
Es fundamental, a la hora de gestionar nuestro talento, saber exactamente cuál es el objetivo de desarrollarlo; es decir, lo que verdaderamente importa no es el talento en sí mismo, lo importante es lo que hacemos con él. Simplemente lo que tenemos que hacer es definir claramente lo que queremos y luchar por conseguirlo.
A continuación os exponemos unos consejos claves para gestionar tu talento:
- No pienses que lo sabes todo. Ten curiosidad, investiga y aprende.
- No te conformes con lo que tienes por delante, sé inconformista.
- Pon en duda tus creencias. Explora y reflexiona.
- Suma, multiplicarás resultados.
- Conócete. Nadie mejor que tú para saber de ti.
- Nunca dejes de apasionarte.
- No desprecies lo obvio.
- No pongas límites a tu conocimiento.
- Potenciar el talento de los otros es potenciar el tuyo propio.
- Crea una red de apoyo y confianza
- Pierde el miedo. Atrévete y arriesga.
- Quiérete. Trabaja tu autoestima.
En conclusión, para gestionar el talento de otros, es necesario saber gestionar el nuestro. Todos tenemos talento, lo que necesitamos es conocer nuestras capacidades, potenciarlas y enfocarlas en un objetivo. Dentro de la empresa es un aspecto básico y tradicionalmente olvidado e ignorado. ¡Estamos a tiempo para potenciarlo!