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Estacionalidad, en el contexto del turismo, significa que los flujos o corrientes turísticas tienden a concentrarse en torno a determinadas épocas del año, repitiéndose este proceso anualmente.
Como dicen en mi pueblo “el llanto sobre el difunto”, y si no queremos hablar de estacionalidad turística, tenemos que ponernos a trabajar desde ya. Ahora que las cosas están cambiando, es el momento de hacer más.
Andalucía es mucho más que sol y playa, tenemos que imbuirnos este claim y salir fuera a venderlo. Pero para poder vender otros conceptos de turismo como puedan ser el basado en la salud, el ornitológico, el micológico, el de naturaleza, moda, o el marinero, etc., es necesario conocer más nuestra tierra y ser conscientes del potencial del tejido empresarial andaluz.
Para evitar las grandes destrucciones de empleo que conlleva la estacionalidad, necesitamos de un gran esfuerzo por parte de las Administraciones Públicas, patronales, sindicatos y el tejido empresarial, se tienen que sentar, para alinear estratégicamente y poner encima de la mesa un plan estratégico que nos ayude a vencer la estacionalidad, sin el apoyo de todos los actores, será difícil la tarea.
¿Qué origina la estacionalidad turística? y ¿Qué consecuencias negativas tiene?
Las causas que originan la estacionalidad en turismo se suelen agrupar en dos grandes categorías:
A.- Factores naturales: clima, naturaleza, medio ambiente natural, etc.
B.- Factores institucionales: organización de los periodos vacacionales vs. calendario laboral / escolar, cultura, tradiciones, etc.
En cuanto a aspectos negativos sobre la estacionalidad que podemos reseñar, se encuentran:
– Efectos económicos: pérdida de rentabilidad e ineficiencia de los recursos
– Efectos laborales: inestabilidad y precariedad en el empleo.
– Efectos ecológicos: sobreexplotación de recursos (deterioro de la vegetación, trastornos de la fauna, erosión, etc.)
– Efectos socioculturales: aculturación de la comunidad receptora.
– Efectos sobre la imagen del destino: masificación, pérdida de calidad del destino…
El escenario turístico global en el que nos movemos es un mercado con un crecimiento sostenido y cada vez más competitivo e innovador desde la oferta.
Comprendiendo la estacionalidad andaluza
Para explicar la fuerte estacionalidad del turismo que nos visita en Andalucía encontramos los propios rasgos distintivos del producto que ofrecemos, sustentado principalmente en el turismo vacacional asociado a unas determinadas condiciones climáticas.
Como segundo factor determinante de la estacionalidad en Andalucía, es la pauta vacacional del principal mercado emisor, el español.
«Si quieres resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo.»
Albert Einstein
Las claves para bajar los niveles de estacionalidad pasan por:
– La Innovación turística.
– La diversificación / complementariedad: nuestra región es mucho más que sol y playa.
– Atractividad: necesitamos hacer más atractivo el destino.
– Sostenibilidad: todas las acciones que hagamos tienen que ser sostenibles en tiempo y forma.
– Campañas de promoción multiformato en los destinos emergentes.
¿Y todo esto como lo podemos abordar?
– Creación de paquetes turísticos orientados a los nuevos sectores sociológicos tales como jóvenes, dinkis, burgueses, etc., en contra estación.
– Buscando la complementariedad con otros actores (hosteleros, empresas organizadoras de congresos, clúster del turismo sanitario, asociaciones de moda, bodegueros, ornitólogos…).
– Cooperar que no competir (coopetición) en materias tan necesarias como son la promoción y comercialización en origen (utilizando los medios analógicos o digitales en los que tenga presencia nuestro público objetivo).
Fuentes consultadas:
Plan Estratégico Contra la Estacionalidad
La edad de oro del turismo español
Turismo: Destino Andalucía
Innovación en turismo significa sumar y diferenciarse, ¿te unes?
