Foto: Los Soprano
Por Leonor Cabrera ( @leonor_cabrera ) – Viventi Desarrollo Personal y Profesional
Cuando nos lanzamos a la aventura de emprender o de montar una empresa uno de los primeros conflictos que surgen son de identidad, en este caso, de identidad de tu empresa. Si ya es difícil y complicado saber cómo somos nosotros mismos, ¿cómo crear la identidad de una empresa que nace de la nada y que está dando sus primeros pasos?
Está claro que en esa empresa va a haber mucho de tu personalidad y de la de tus socios, si es que los tienes, al igual que le sucedía a la empresa de Tony en la serie ‘Los Soprano’ que estaba impregnada de la personalidad de su jefe mafioso y de la de sus secuaces.
Tu criatura no podrá tener una imagen agresiva si tú no sacas tu agresividad o divertida si eres seria. Y no podrá ser seria si para ti lo importante es que la diversión y te gusta llevar una vida desenfadada.
A la hora de trabajar la identidad de las empresas con las personas que vienen a Viventi para seguir nuestro Programa de Desarrollo Profesional lo que hacemos es trabajar primero la identidad de los socios con el fin de que puedan crearse espacios comunes que definan quién es esa empresa, cuáles son sus rasgos, su carácter, su personalidad.
Así que si estás en el proceso de crear tu empresa y de definir tu personalidad te sugiero que comiences por mirar dentro de ti. ¿Cómo eres tú? ¿Eres una persona estricta y rigurosa o quizás relajada y a la que le gusta la flexibilidad? ¿Para ti es importante la imagen que das al mundo o funcionas mejor cuando sientes lo que haces y muestras al mundo tu creatividad?
Quizás eres de esas personas muy mentales que necesitas tener todas las normas por escrito y saber en cada momento a qué atenerse. O por el contrario puede que seas un rey de la improvisación y que tengas una gran capacidad de tratar con el público y darle a cada uno lo que necesitas. Tal vez seas de esas personas a las que le gusta la intensidad y que requieren retos continuos para sentirse vivas o, por el contrario, de las que prefieren la estabilidad y lo seguro.
Plantearte estas cuestiones va a hacer que la identidad de tu empresa se dibuje poco a poco y que vayas teniendo claro cómo presentarla ante el mundo. Cuando más alineada esté la identidad de tu empresa con la tuya propia, más fácil será poder ofrecer una imagen congruente y creíble ante tus clientes.
En segundo lugar te aconsejo que trabajes con tus valores. Los valores son una especie de brújula que nos indican hacia donde ir y el tenerlos claros va a hacer que tengamos claro hacia dónde va nuestra empresa, cuál es su fin último.
Para trabajar con los valores puedes plantearte cuáles son los diez que rigen tu vida y escribirlos en un folio en blanco. Una vez que los tengas, ve quitando los que son menos importantes hasta que te quedes con los tres vitales para ti, esos a los que jamás renunciarías. ¿Tu empresa está alineada con esos valores? Si no es así, hay algo que no funciona.
Si has seguido estos pasos y has contestado a estas preguntas, me encantaría que nos contarás qué has descubierto sobre ti y sobre la identidad de tu empresa con la lectura de este post.
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